Dolor en la uretra: ¿Causas del ardor, picor de la uretra?

El dolor en la uretra está estrechamente relacionado con diversos problemas, enfermedades y dolencias relacionadas con las vías urinarias y los órganos urinarios.

Por lo general, detrás de este tipo de dolor se encuentran diversas enfermedades infecciosas, inflamatorias o de transmisión sexual.

Su diagnóstico precoz y tratamiento temprano determinan que el paciente se cure lo más rápida y eficazmente posible. Por el contrario, con problemas prolongados existe el riesgo de complicaciones.

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¿Puede producirse después de mantener relaciones sexuales?
¿Qué otros problemas pueden asociarse?

Inflamación de las vías urinarias

El dolor uretral también es un síntoma muy frecuente de enfermedades inflamatorias como la cistitis y la uretritis. Estas inflamaciones afectan con mayor frecuencia a las mujeres, y normalmente entre los 20 y los 50 años.

En las mujeres, estas inflamaciones son más frecuentes debido a que la uretra es más corta que en los hombres. Las bacterias se propagan más rápidamente en la parte superior de las vías urinarias, debido a la ubicación de la uretra, cerca de la vagina y del orificio anal.

Y por eso las infecciones por enterobacterias, como la E. Coli, procedentes de las heces son frecuentes en mujeres y niñas. También las infecciones concurrentes del tracto genital. Pero también la incidencia del dolor uretral en las enfermedades de transmisión sexual.

Un ejemplo de ello son las micosis vaginales, es decir, las inflamaciones micóticas (por hongos) de la vagina, que también cursan con dolor uretral.

Los grupos de riesgo de las infecciones urinarias son:

• diabéticos
• mujeres con inmunidad debilitada, especialmente en la superficie de las mucosas
• mujeres embarazadas
• personas que sufren incontinencia urinaria
• personas con una sonda urinaria insertada
• con cálculos urinarios
• anomalías anatómicas de las vías urinarias
• niños con pañales

La infección reaparece repetidamente, incluso varias veces al año. Se manifiesta con un inicio rápido. También se presentan otros síntomas, como ganas de orinar y dificultad para vaciar la orina, así como sangre en la orina. El tratamiento suele ser con antibióticos.

Diversas infecciones bacterianas en la uretra tienen manifestaciones dolorosas. Si se descuidan, también pueden alcanzar una fase crónica. Las enfermedades inflamatorias deben tratarse de forma especialmente profesional, con medios farmacológicos diseñados para este fin.

Por este motivo, es muy importante no descuidar el dolor en la zona uretral. También son síntomas de este tipo diversos daños mecánicos que pueden haberse producido sin conocimiento ni causa previa.

Enfermedades de transmisión sexual

Entre las enfermedades de transmisión sexual que se asocian a dolor en la uretra se encuentran la gonorrea, la sífilis o las infecciones por clamidia. Otro ejemplo es una infección causada por un protozoo, concretamente Trichomonas vaginalis, enfermedad que recibe el nombre de tricomoniasis.

Aunque se trata de enfermedades de transmisión sexual, también se transmiten de forma no sexual, a través del contacto con fluidos corporales infectados y, a menudo, a través de productos de higiene como toallas, toallitas de baño o maquinillas de afeitar.

Muy a menudo, pueden observarse otros síntomas

• picor en la uretra
• dolores como ardor, corte al orinar
• secreción de la uretra
• aumento de la temperatura corporal
• enrojecimiento
• dolor vaginal acompañante en las mujeres

Para las enfermedades de transmisión sexual es necesario un diagnóstico precoz y el inicio de un tratamiento. Estas infecciones suelen tratarse mediante la administración de antibióticos y otros agentes farmacológicos.

Cálculos urinarios y dolor uretral

A menudo, los cálculos renales y ureterales se asocian a dolor en la uretra. Con el tiempo, pasan de los riñones al tracto urinario y pueden alojarse en la uretra.

Pero en el caso de esta enfermedad, los síntomas se presentan antes, e ignorarlos puede llevar muy lejos.

Es cierto que el tratamiento en una fase tardía (por ejemplo, estos cálculos) es mucho más doloroso, más difícil y más duradero, lo que en última instancia es negativo para el paciente.

Además, el dolor también puede aparecer cuando la uretra está estrechada. El estrechamiento se produce por un accidente, puede ser congénito o causado por una intervención quirúrgica.

El cáncer de vejiga o de próstata en los hombres también puede cursar con dolor. Es asintomático durante mucho tiempo y la sangre en la orina aparece como primer síntoma.