Tratamiento de quemaduras: primeros auxilios y medicación + procedimiento correcto

El tratamiento de las quemaduras comienza con los primeros auxilios, que en la mayoría de los casos son laicos y, por lo tanto, sin ayuda. A este tratamiento inicial le siguen los primeros auxilios y el tratamiento profesional. Incluso los primeros auxilios prestados de forma poco profesional pero correcta ayudan de forma significativa a la actuación posterior.

1. acciones importantes:

  • interrumpir la aplicación de alta temperatura o corriente eléctrica
  • alejar a la persona del entorno en llamas o del objeto caliente y el entorno nocivo
  • quitarse la ropa caliente, quemada o mojada
  • tenga cuidado: si la ropa está soldada al cuerpo, no se la quite
  • retirar anillos, joyas del cuerpo
  • posición de la persona afectada, al menos sentada, si es más extensa, tumbada
  • enfriamiento de la zona afectada
    • al menos 20 minutos en caso de grado I y II
    • los grados III y IV no se enfrían con agua
  • cubrir la herida, preferiblemente con un apósito antiadherente - si esto no es suficiente, es una buena idea utilizar una bolsa de microtene limpia o papel de aluminio alimentario
    • no es necesario cubrir el estadio I
    • si no se perforan las ampollas, existe riesgo de infección de la herida
    • la ampolla se desprende por sí sola
    • no se utiliza pomada ni apósito en la herida
  • se fija el miembro afectado para evitar que se mueva
  • medidas antichoque para quemaduras superiores al 15 % en adultos y al 10 % en niños
  • también es importante la detección de otras posibles lesiones
  • es importante mantener tranquila a la persona afectada
  • se prohíbe la ingesta de alimentos y líquidos hasta que se haya realizado un examen profesional
  • acudir a un especialista o pedir ayuda

El procedimiento correcto para enfriar una quemadura

Es necesario recordar que un enfriamiento adecuado reducirá el daño final, además de aliviar el dolor. El enfriamiento debe realizarse con agua corriente y fría. El chorro de agua debe ser suave y no violento para no dañar la piel ya rota.

Las quemaduras deben enfriarse en una superficie mayor del cuerpo. Los datos de distintas fuentes ofrecen información diferente. Por ejemplo, deben enfriarse incluso cuando la discapacidad es de hasta el 50% en adultos y de hasta el 30% en niños. Otra fuente afirma que los adultos no deben enfriarse por encima del 20%. Los niños deben enfriarse por encima del 10% y los pequeños por encima del 5% de la superficie corporal total estimada.

También es importante proteger el resto del cuerpo de la pérdida de calor, lo que evitará la hipotermia. El agua del grifo a una temperatura de entre 10 y 15 grados centígrados es suficiente para enfriar. E incluso agua a una temperatura de hasta 25 grados centígrados. Por ejemplo, agua limpia de una botella.

Recuerde:
Enfríe la quemadura, caliente al herido.
No utilice alimentos de la nevera o el congelador ni cubitos de hielo para enfriarse.

Es muy importante que tengas en cuenta tu propia seguridad cuando prestes primeros auxilios, ya que puede haber peligros en el lugar. Por eso también es importante que averigües las circunstancias de la lesión o accidente: si hay otras personas en el lugar, cuántos heridos hay.

La información encontrada es útil a la hora de ponerse en contacto con la línea de emergencias. La comunicación con el operador de emergencias debe ser tranquila, clara, objetiva y veraz.

La información importante al hacer una llamada es

  • qué ha ocurrido
  • dónde ha ocurrido
  • cuándo ha ocurrido
  • a quién le ha ocurrido

Lo más habitual es que las quemaduras domésticas sean de poca importancia y afecten aproximadamente al 1% de la superficie corporal. En el caso del estadio I, son importantes los primeros auxilios en el sentido de enfriamiento. No es necesario cubrir la herida posteriormente. En el caso del estadio II, se aplican los principios anteriores.

Primeros auxilios en caso de quemaduras químicas

  • retirada de la ropa afectada
  • retirar primero los productos químicos secos sin agua, ya que el agua puede activarlos
  • una vez retirados, enfriar con agua durante 30-60 minutos
  • determinación de la sustancia y su concentración
  • limpiar la superposición

cuando el ojo esté afectado

  • enjuagar durante al menos 30 minutos
  • abrir el párpado y parpadear
  • flujo de agua desde el interior del ángulo ocular hacia el exterior
  • superposición limpia
  • examen

afectación de la cavidad bucal

  • enjuague bucal
  • escupir el agua de enjuague
  • examen

Tras ingestión de sustancia corrosiva

  • no provocar el vómito.
  • Tampoco lavado gástrico.
  • si es posible, posición sentada, si no, posición estable
  • administrar agua limpia a una persona consciente
  • examen

Traumatismo por inhalación, inhalación de humo caliente, aire, vapor:

  • evaluación de las quemaduras faciales
  • pelos quemados en nariz, mejillas
  • tos con mucosidad y hollín
  • dificultad para respirar
  • tratamiento de las quemaduras visibles
  • asegurar el suministro de aire fresco
  • aflojar la ropa ajustada
  • tranquilizar al herido
  • determinar la causa

Electrocución:

  • Identificar y eliminar la fuente de la descarga eléctrica
  • no tocar al accidentado
  • evaluar la función circulatoria
    • alteraciones frecuentes del ritmo cardiaco
    • parada cardiaca
    • inicio inmediato de las compresiones torácicas
  • atención a las lesiones asociadas, caídas frecuentes y riesgo de fracturas
  • movimiento mínimo con el accidentado
  • tratamiento de quemaduras, localizar la zona de paso de la corriente eléctrica por el cuerpo
    • el punto de entrada de la corriente eléctrica
    • el punto de salida de la descarga eléctrica

Las quemaduras leves comunes se tratan de forma ambulatoria con agentes refrigerantes seguidos de cremas antibacterianas. Se administran analgésicos (medicamentos para el dolor). Pueden utilizarse diversas cremas, sprays, geles o parches para quemaduras como cuidados posteriores para acelerar la curación.

fcompartir en Facebook