¿Cómo se trata la angina de pecho y puede curarse?

El tratamiento de la angina de pecho se basa en productos farmacéuticos. Sin embargo, los primeros auxilios son importantes cuando se produce un episodio de angina de pecho. Consisten en interrumpir cualquier esfuerzo, tanto físico como mental, lo que reducirá las demandas del corazón. Es importante calmar a la persona y, por supuesto, ésta debe estar en un entorno tranquilo.

Si a la persona afectada se le ha recetado NTG en aerosol (nitroglicerina) u otro nitrato, debe aplicárselo. Al administrar NTG, el principio es que la presión arterial sistólica (la presión superior, primera y mayor) debe ser superior a 100. De lo contrario, existe el riesgo de pérdida de conocimiento debido a la hipotensión (presión baja), es decir, colapso. La nitroglicerina no debe administrarse durante las náuseas y desmayos normales.

Si el dolor torácico persiste, es importante llamar a los servicios médicos de urgencia, debido al riesgo de infarto de miocardio. Por supuesto, esto también es válido si la persona no tiene NTG y la dificultad persiste o si es la primera vez que la experimenta. Asimismo, si la naturaleza y la intensidad de la dificultad cambian en una persona con PA estable conocida.

Se utilizan fármacos de diferentes grupos farmacológicos destinados a mantener la permeabilidad de los vasos sanguíneos, por ejemplo, nitratos de acción corta o prolongada. Los antiagregantes plaquetarios como el ácido acetilsalicílico (AAS, como la acilpirina) o el tratamiento antitrombótico (clopidogrel, ticlopidina o warfarina) garantizan una coagulación sanguínea adecuada. Además, se utilizan betabloqueantes, inhibidores de la ECA, antagonistas del calcio o estatinas. La angiografía coronaria seguida de angioplastia coronaria es un método específico.

Es muy importante la prevención, que incluye la modificación del estilo de vida general y medidas de régimen como:

• cambiar los hábitos alimentarios
  • una dieta de tipo mediterráneo es adecuada
  • limitar el consumo de grasas
  • menos sal
  • no comer alimentos ahumados, grasos, salados ni dulces
  • son adecuadas las verduras y las frutas
  • cereales integrales, cereales
  • aceite de oliva, frutos secos y semillas
  • hierbas aromáticas
  • carne magra y especialmente pescado
  • comer más a menudo y en porciones más pequeñas
• suficiente actividad física
• no fumar
• no beber alcohol
• reducir el peso en caso de sobrepeso y obesidad
• evitar el estrés
• beber lo suficiente
• tratamiento de otras enfermedades