¿Cómo se trata un absceso cerebral? El tratamiento incluye antibióticos, cirugía

El tratamiento de un absceso cerebral consiste en una combinación de antibióticos y cirugía.

En el diagnóstico precoz, si el absceso aún no está encapsulado por una membrana o los abscesos son pequeños y múltiples, el tratamiento se inicia con antibióticos.

Tras el diagnóstico, el tratamiento se indica inmediatamente, sin esperar los resultados de los exámenes microbiológicos, que pueden tardar varios días.

Se administra penicilina G intravenosa a una dosis diaria de 20-24 millones de unidades en combinación con 4-6 gramos de cloranfenicol.

Posteriormente, en función del resultado de la microbiología, se continúa con los antibióticos adecuados.

Estos principios activos se utilizan, en función de la sensibilidad del patógeno, la mayoría de las veces en combinaciones:

• Metronidazol
• cefalosporinas de 3ª generación
• penicilina
• vancomicina
• gentamicina
• meropenem
• anfotericina

Si el absceso ya ha formado una membrana gruesa, se inicia la terapia antibiótica con limpieza quirúrgica y drenaje simultáneos.

La duración recomendada de la terapia antibiótica es de 4-8 semanas.

En caso de edema cerebral extenso, también está indicada la terapia antiedematosa con corticosteroides y manitol, también administrados por vía intravenosa a intervalos de 6 horas.

La prevención de los ataques epilépticos con fármacos antiepilépticos también forma parte del tratamiento.